
El zapatero y los duendes
Material preparado por Fundación Entrelíneas.
Material preparado por Fundación Entrelíneas.
Los duendes son seres pequeñitos, juguetones, traviesos y burlones. Habitan en casas o en la naturaleza, pero solo los que creen en ellos logran verlos. Aparecen en muchos cuentos, a veces con cara de viejo, otras, con cara de niño. Donde sea que vayan, siempre sucede algo mágico.
¡Mira la cantidad de duendes que se esconden en las vidas cotidianas de las personas!
Ilustraciones de Ricardo Sánchez.
¿Sabías que la historia de “El zapatero y los duendes” se basó en un cuento llamado “El duendecillo fraile”?
Dicen que a los duendes frailes no les gusta que les devuelvan los favores. ¡Mira este cuento escrito por Fernán Caballero a mediados del S. XIX!
Fuente: Duendes, guía de los seres mágicos de España. Canales, Carlos; Callejo, Jesús. Ilustraciones de Sánchez, Ricardo. Editorial Edaf. 1994.
Esta leyenda llegó a oídos de los hermanos Grimm que crearon una nueva versión llamada “El zapatero y los duendes”.
¿En qué se parecen y en qué se diferencian el duende frailecillo de los duendes zapateros?
¡Conoce a los primeros autores que escribieron este relato oral!
J. y W. Grimm. Cuentos de niños y del hogar. Ediciones generales Anaya. 1985.
¿Cómo es la ropa de la mujer y del zapatero? ¿Se parece a la que usan en tu familia? Y las sillas del cuento, ¿se parecen a las de tu casa? ¿Por qué crees que son así?
Los cuentos y sus ilustraciones nos hacen viajar a diferentes lugares del mundo. El ilustrador de este cuento, Ignacio del Real, se inspiró en muchas culturas orientales para hacer los dibujos. Buscó fotografías de Rusia y de Mongolia. ¿Sabes dónde están esos países? Búscalos en este mapa de Asia.
Fuente: https://mapamundiparaimprimir.com/asia
Mira las fotos de casas y de vestimentas que utilizó el ilustrador para inspirarse. ¡Busca dentro del cuento a qué imágenes se parecen!
El ilustrador también se inspiró en otras culturas como la Inuit, Yupik y Nenets para realizar los rostros de los duendes. Mira la máscara a continuación y compárala con el rostro del duende. ¿En qué se parecen?
Los instrumentos de este cuento también son del oriente.
El Igil es un tipo de violín muy utilizado en Siberia (Rusia del Este). Mira la cabeza de caballo que tiene en uno de sus extremos. Este animal es muy importante en la vida de este pueblo, tanto para su trabajo como para sus batallas. Por ello está presente en muchos elementos, creencias e historias ancestrales. ¿Quieres escuchar cómo suena?
La balalaika es un instrumento de cuerdas muy popular en Rusia. Tiene forma triangular, está hecho de madera de arce o abeto y es hueco por dentro. Antiguamente, las cuerdas se hacían con tripa de animal. Nació como un instrumento para la diversión que era utilizado por bufones y artistas ambulantes. Incluso cuentan por ahí que algunos se perseguían y golpeaban la cabeza con ellas. Disfruta su sonido en este bello recital del artista Andréiev.
Otra fuente de inspiración muy importante para el ilustrador fueron los dibujos del artista ruso Gennady Pavlishin. ¿Qué elementos de este artista crees que rescató?
¿Viste las distintas herramientas y materiales que aparecen durante el cuento? El oficio de zapatero es un arte tradicional que se ha traspasado de generación en generación, de maestros a aprendices. Incluso para algunas personas la labor zapatera es un oficio familiar, aunque cada vez haya menos personas que continúen realizando este trabajo de forma artesanal.
Elaborar un zapato requiere de técnica, esfuerzo y tiempo. ¡Observa los pasos para crear un zapato!
– Mira en este vídeo cómo se elabora un zapato artesanal:
¿Qué herramientas del video reconoces en el cuento digital que acabas de leer?
Te invitamos a crear una plantilla de zapato con cordones.
Mira este tutorial que te indica cada paso que debes seguir para elaborar tu zapato:
Materiales:
Instrucciones:
Aquí te dejamos un modelo de plantilla de zapato para que lo puedas imprimir:
Pregunta a algún adulto si conoce esta canción tradicional y pídele que la cante contigo:
El zapaterito clava y clava,
clava, clava en el tacón
y al clavar contento daba, daba
enterito el corazón.
El viejito Simón zapatero remendón
le voy a contar
lo que le pasó
martillando un tacón y de tanto trabajar
rendido se quedó y se durmió.
El zapaterito clava y clava,
clava, clava en el tacón
y al clavar contento daba, daba
enterito el corazón.
Y empezó a soñar feliz que una mujer
linda de verdad, le vino a decir
si me arregla usted muy bien este tacón
le daré a Simón todo mi querer.
El zapaterito clava y clava,
clava, clava en el tacón
y al clavar contento daba, daba
enterito el corazón.
Atrévete a jugar con tu voz y graba la historia como tú quieras. Puedes inventar una historia diferente o cambiar los nombres de los personajes.
Si tienes algún instrumento, intenta agregarle música.
Los duendes suelen ser muy traviesos y juguetones. Pero no todos tienen la suerte de verlos. La poeta argentina María Elena Walsh logró conocer a uno, y después de mucho observarlo, escribió un poema sobre él. Te invitamos a conocerlo y a hacer un dibujo.
Cuando tengas listo tu dibujo, ponlo junto a una ventana y ve si durante los siguientes días el duende hace alguna travesura en tu casa.
Es un hombrecito
petiso y panzón
con un sombrerote
y un largo bastón,
los ojos saltones,
el genio burlón,
que sale a la siesta
por el callejón
besando a las niñas,
corriendo al varón.
Derrama la leche,
apaga el carbón,
resala la sopa,
esconde el jabón,
y mil travesuras
que no hago mención.
Hay quienes lo han visto
por la población:
el duende le llaman,
mentiras no son.
¡Los duendes traviesos tomaron algunas de las palabras del poema y las desperdigaron sobre una sopa! ¡Sólo tú puedes encontrarlas!
¿Sabías que los ilustradores, antes de realizar los dibujos definitivos de un cuento, ensayan haciendo bocetos?
Estos son los bocetos de las escenas 2 y 5. ¡Mira qué lindos! Si puedes, imprímelos y píntalos como tú quieras. También puedes hacer tu propio diseño de zapato.